Por: Marigel Campos, Pronatura Península de Yucatán A.C. María de Lourdes Souza Hernández, Instituto de Biodiversidad y Áreas Naturales Protegidas del Estado de Quintana Roo. Flor Paulina Rodríguez Reynaga, Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad.
“México es uno de los 12 países megadiversos en el mundo” ¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase? pero ¿realmente comprendemos y valoramos su significado? ¿somos conscientes de lo afortunados que somos en pertenecer al grupo de países que albergan el mayor índice de biodiversidad y sustentan gran parte de la vida en el planeta?
La selva, las mágicas costas y arrecifes de Quintana Roo, son algunos de los ecosistemas a nivel nacional que son el hábitat de cientos de especies de mamíferos, anfibios, reptiles, aves, peces, insectos y plantas. El estado cuenta con 6,889 especies registradas, de las cuales 44 son endémicas y 214 se encuentran comprendidas dentro de alguna categoría en la NOM-059-SEMARNAT-2010. Esta diversidad biológica, además de encantarnos con su belleza, representa un componente de gran importancia en nuestra vida. Los seres humanos no solo estamos conectados a la naturaleza, sino que somos parte y dependemos de ella para vivir, por lo tanto, todo el impacto que generamos en los ecosistemas y especies irremediablemente repercute en nosotros mismos.
De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la degradación y pérdida de la biodiversidad tiene una conexión directa con nuestra resiliencia ante desastres naturales como inundaciones, tormentas, huracanes y sequías; así como ante la propagación de enfermedades como la reciente COVID-19. En su faceta económica, más de 70% de la población, especialmente las zonas de mayor pobreza dependen, al menos en parte de los recursos naturales para generar ingresos de manera directa, mediante actividades como la agricultura, la pesca, la silvicultura, el ecoturismo u otras actividades basadas en la naturaleza.
Es en este contexto que en las últimas décadas, la preocupación mundial por el cuidado y la protección de la diversidad biológica ha generado diversos foros de discusión internacionales así como el impulso de estrategias de planificación, tales como el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) del cual se originan las metas de Aichi, y los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), entre otros. México se suma a la protección de la biodiversidad durante el año 2000, creando la Estrategia Nacional sobre biodiversidad en México y Plan de Acción 2016-2030 (ENBioMex).
Motivo por el cual, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) en conjunto con las entidades federativas, impulsaron la creación de instrumentos a nivel estatal, cuyo fin es contribuir a mejorar las capacidades locales de planeación y gestión de los recursos biológicos en cada uno de los estados del país.
En este sentido, tras un trabajo colaborativo de varios años en el que participaron alrededor de 220 personas representantes de los diversos sectores, Quintana Roo generó su Estrategia Estatal para la Conservación y el Uso Sustentable de la Biodiversidad (ECUSBEQROO), culminando el proceso en el año 2019, convirtiéndose así en uno de los 14 estados, que cuenta ya con una herramienta de planificación, que establece objetivos, metas prioridades, acciones, responsables y recursos que la entidad necesita para mejorar la gestión de la biodiversidad y asegurar su conservación y uso sustentable.
La ECUSBEQROO como tal contiene una visión del estado de Quintana Roo al 2030, así como su propósito de prevenir, frenar y reducir la pérdida de la biodiversidad e impulsar su conservación, con base en el conocimiento científico y tradicional, mediante la generación de espacios para la colaboración entre todos los sectores de la administración pública y la sociedad con énfasis en la integración regional y vinculación internacional. Basada en 4 principios conductores, vertidos en 6 ejes estratégicos y 29 líneas de acción que establecen en su totalidad 146 acciones.
En consecuencia, este valioso instrumento está encausado a conducir la política pública y toma de decisiones en materia conservación de la diversidad biológica del estado, enfatizando que para su implementación es esencial la voluntad de todos los actores involucrados, que permita una mayor suma de esfuerzos y sinergia entre los tres niveles de gobierno, sector académico, productivo y social. Por lo que la socialización de la misma, juega un papel clave en este proceso.
El presente año PRONATURA Península de Yucatán A.C., se suma a este trabajo en equipo a afecto de colaborar en su difusión, gracias al apoyo del Programa de Pequeñas Donaciones del PNUD (PPD).
Cada uno de nosotros tenemos un papel elemental en su implementación, te invitamos a consultarla, utilizarla y apoyarnos a difundirla, conociéndola a través de las páginas www.gob.mx/sema/ECUSBEQROO y en www.biodiversidadpeninsuladeyucatan.com.
¡Recuerda que todos somos parte de la biodiversidad, por lo tanto, debemos preservarla y protegerla!
Chetumal, Quintana Roo