- Padre y entrenador de Celex Antonio Castro Olivares, quien dejó a un lado el futbol para seguir los pasos de su padre, mayor ídolo
- Además de sus tres hijos, este instructor ha sumado a lo largo de su carrera varios pupilos, de los cuales muchos de ellos han destacado en el box
“La verdad es muy complicado ser papá y entrenador. Los hijos hacen lo que hacen los padres, ya que los padres son el ejemplo de los hijos.
Desde los 5 años yo llevé a mi hijo a todos los eventos en los que participaba, por lo que poco a poco fue adentrándose en el box, hasta que debutó a nivel amateur en lo que eran las Olimpiadas Nacionales, donde cosechó varios campeonatos”, fueron las palabras de Celestino Castro, entrenador de box, quien creó un programa en su gimnasio para rescatar a los jóvenes de las calles, que al final se han sumado como si fueran sus hijos.
En ese sentido dijo que no ha sido nada fácil ser papá y entrenador a la vez, tanto para él como para su hijo, quien ha seguido un buen camino, ya que aspira a concretar su carrera como boxeador profesional, al conquistar un título a nivel mundial, por lo que ha dejado atrás fiestas y a los amigos.
No obstante, Celex Antonio Castro Olivares tuvo la oportunidad, misma que le fue brindada por su padre, de convertirse en futbolista, donde también destacó a nivel amateur, aunque al final prefirió seguir los pasos de su mayor ídolo, su padre, que ahora es su entrenador, por lo que para ambos el box se ha convertido en una forma de vida.
Explicó que lo único que ha hecho para que su hijo siga un buen camino es hablar con él, y explicarle que en la calle es amigo, en el gimnasio su entrenador y en la casa su papá, lo cual no ha sido fácil.
Comentó que en su gimnasio tienen un programa para rescatar a los jóvenes de las calles, a quienes les brindamos una oportunidad en la vida, ya que según su opinión solo están desorientados, por lo que en muchos casos se ha convertido en un tutor para ellos, pues como a su hijo, los procura y les brinda su apoyo, además de que les hace ver sus errores como si fuera el papá que algunos no han tenido.
Cabe señalar que la familia Castro Olivares es cien por ciento boxística, ya que las dos hijas de Celestino fueron también pugilistas, y a la fecha siguen laborando en este deporte, en tanto que su esposa lo ha apoyado en todos los eventos que el organiza o participa.
Cancún, Quintana Roo